Rara vez se reciben correos como el siguiente, una  persona agradecido por el trabajo realizado en su Indemnización Máxima, nos lo envío la semana pasada y tras pedirle su permiso lo hemos publicado aquí. Para nosotros es un gran honor el haber recibido semejante reconocimiento a nuestro trabajo, pues refleja exactamente la imagen que nos hemos preocupado de trasmitir. Desde aquí queremos agradeceros a todos la confianza depositada en nosotros, hacéis que nuestro proyecto cobre vida.

 

Sólo quiero que sepas, de verdad, que me alegró muchísimo saber de ti. Estoy muy, pero que muy contenta de que la suerte, o la casualidad, o lo que sea que me llevó aquel día a escribir una carta como la mía a una página desconocida, diera lugar a descubrir que hay personas que además de buenos profesionales, son personas humanas ante todo.

Te agradezco a nivel personal la información, la preocupación y la empatía. De verdad que después de aquel día de llanto y desesperación, dormí pensando que por fin estaba en buenas manos. Nada me alegra más que saber que así era, que mi intuición no me engañó aquel día y sobre todo, que he podido darte las gracias personalmente, que en realidad era una de esas cosas que necesitaba poder hacer.

Ya sé que forma parte de tu trabajo ponerte en la piel de los demás, pero eso sólo me hace tener la certeza de que además de un buen profesional, eres una gran persona.

Tu proyecto va a ayudar a mucha gente, lo sé, ya lo está haciendo. Gracias por contribuir a que las cosas sean diferentes. Por cosas así, sigo teniendo fe en el género humano.

Un abrazo muy fuerte

Isthar